Lilo Villaplana: Un orgullo para nosotros los cubanos. |
Ayer domingo se estrenó en la cadena televisiva
“América TeVé” la primera parte de la serie “Leyendas del Exilio”, una serie
ideada por el productor español Carlos Vasallo, CEO de América TeVé, quien
encomendó la dirección al destacado director cubano Lilo Vilaplana.
Lilo nació en Nuevitas, un importante puerto
localizado en la costa norte de Cuba en la provincia de Camagüey donde desde
pequeño mostró su inclinación hacia el arte. Leyó libros y de manera natural comenzó
a escribir cuentos y a crear teatro. Su formación profesional la realizó en la
Escuela de Arte de la Habana, y comenzó para teatro y televisión.
Como pasó con muchos cubanos, las limitaciones
que la dictadura cubana imponía le impidieron desarrollar su potencial, fue censurado y hasta amenazado
de muerte. Por eso tuvo que seguir su carrera fuera de Cuba, y es así que
emigra a Colombia. Lilo se enamoró de Colombia y Colombia se enamoró de Lilo. Y
fue en Colombia donde su carrera despegó a niveles impensados.
Dirigió innumerables episodios y series, tales
como “Justicia o Ley”, “Auto Stop”, “Unidad Investigativa”, “Expedientes”, “Retratos”,
“Me amarás bajo la lluvia”, “Se me olvidó decirte”, “el pasado no perdona”, “Por
Amor”, “Zona Rosa”, “La Deuda”, “La Dama de Troya”, “Remedio Mortal”, “El Capo”,
“Mentes en Shock”, y muchas más.
Ha sido nominado para diversos premios y ha
ganado muchos de ellos. En particular, por la serie “El Capo” obtuvo 7 premios
India Catalina y 7 premios TV y Novelas. Por “La muerte del gato”, ganó el
premio al mejor cortometraje en el festival Iberoamericano de Cortometrajes en
España, y obtuvo el prestigiado Emmy Internacional por “El Infierno de Montoya”.
Ahora se ha involucrado en el proyecto “Leyendas
del Exilio” que tiene como objetivo presentar la historia de los héroes del
exilio cubano, en la lucha contra el castrismo. No discrimina por ideologías ni
métodos. Simplemente presenta la lucha y los sufrimientos de un pequeño grupo
de personas que trataron de evitar la consolidación del castrismo en nuestra
patria.
A pesar de su éxito, Lilo es un hombre sencillo
y comprometido con la libertad de Cuba. Lo hemos visto participar en diversos
eventos y asistir en numerosas ocasiones a la campaña “Todos Marchamos”. Lilo aparte
es un cubano-colombiano que es un patriota obsesionado por la libertad de Cuba.
Continuamente cuando un pelotero cubano triunfa
en las Grandes Ligas de baseball, decimos que “es un orgullo de Cuba”, o si un
cantante nacido en Cuba, triunfa con sus canciones, también decimos que “es un
orgullo de Cuba”.
Lilo Vilaplana no juega en las Grandes Ligas
ni canta. Es un brillante y creativo director en el mundo del Teatro, la
Televisión y el Cine, y sin la menor duda, es un orgullo de Cuba. Un hombre
talentoso, con una carrera brillante de quien todos debemos sentirnos
orgullosos.
Lilo Vilaplana merece que se le organice un
gran homenaje aquí en Miami. Yo invito a las organizaciones culturales y
artísticas, y a las autoridades de la ciudad y el condado para que consideren
realizarle un gran homenaje e invitar al pueblo a participar en el mismo.
Ratifico mi admiración por Lilo Villaplana.
Lo felicito, le doy las gracias por sus aportes a la cultura de Cuba y de Colombia
y considero que ya es una Leyenda y un Orgullo de Cuba.
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